En medio de la lucha que autoridades de diferentes rincones del mundo siguen dando para erradicar el COVID-19, y el llamado urgente a que más personas se vacunen, la farmaceútica que produce la vacuna de Johnson & Johnson, de una sola dosis, decidió suspender la producción del medicamento.
Así lo aseguró CNBC News, haciendo referencia a datos suministrados por el periódico The New York Times, donde se reveló que la única instalación de Johnson & Johnson que estaba produciendo los biológicos, decidió suspender, de manera temporal sus labores de producción.
En el reporte se mencionó además que la planta de producción de Johnson & Johnson, que queda en los Países Bajos han optado por dedicar sus recursos a la producción de otra vacuna, de la que se mencionó que “posiblemente sería más rentable”, y que tendría que ver con otro virus distnto al COVID.
La suspensión en las labores de producción habría comenzando en diciembre pasado , lo que incidiría directamente en los suministros que lleguen a Estados Unidos, donde la vacuna de Johnson & Johnson es una de las tres disponibles, junto a la de Pfizer y Moderna.
Sobre la suspensión en su producción, el New York Times destacó que la compañía lo hizo sin informar abiertamente sobre la situación.
“La compañía estadounidense, que ya se ha retrasado mucho en sus entregas a los países más pobres, cerró silenciosamente a fines del año pasado la única planta que fabricaba lotes utilizables de la vacuna, según personas familiarizadas con la decisión”, destacó el Times.
A pesar del reporte, también se advirtió que por ahora se presume que la decisión es temporal, y que el tiempo inicial que se dieron para frenar la producción en la planta de Leiden será solamente de un par de meses.
Se espera que la emisión de nuevas vacunas se retome este año, pero se desconoce si las reservas existentes lograran cubrir la demanda del medicamento, especialmente en países más pobres.
El año pasado la vacuna de Johnson, también conocida como Jansen, se puso en pausa en su suministro, debido a preocupaciones generadas por la presencia de coágulos en algnos casos, pero luego se autorizó nuevamente su aplicación.
Ante la preocupación que esta decisión acarrea, El Times aseguró que fuentes familiarizadas con la interrupción, que significará la falta de cientos de millones de dosis, revelaron que se han contratado otras instalaciones de producción, pero todavía no están en marcha.
“Este no es el momento de cambiar las líneas de producción de nada, cuando las vidas de las personas en todo el mundo en desarrollo están en juego”, dijo el Dr. Ayoade Alakija, codirector del programa de administración de vacunas de la Unión Africana, quien manifestó su rechazo a la decisión y su preocupación por los efectos que ello tenga en el mundo.
El Times también citó a Jake Sargent, vocero de Johnson & Johnson, quien sin entrar en detalle sobre la suspensión de producción dijo que están “enfocados en asegurar que nuestra vacuna esté disponible donde la gente la necesita” y que la red de producción global “esté trabajando día y noche” para seguir luchando contra la pandemia.