Isadora Nieves Cruz, una influencer de Instagram de 24 años conocida como Pinky Curvy, fue asesinada a tiros en Puerto Rico el 17 de octubre. Su muerte fue confirmada por medios locales, incluidos El Nuevo Día y WAPA-TV, quienes citaron a oficiales de la ley. Cruz salía de un restaurante con un hombre de 23 años, supuestamente su novio, cuando le dispararon a su vehículo.
Según el coronel José Juan García, jefe de la policía en el área de San Juan de Puerto Rico, Cruz fue identificada como la víctima y una investigación está determinando si ella era el objetivo del tiroteo o fue totalmente fortuito.
Cruz, quien nació en Puerto Rico, era modelo e influencer de Instagram con más de 343.000 seguidores. También era empresaria con su propia boutique y su línea de cosméticos. Era madre de una niña de dos años llamada Summer.
Cruz fue asesinada a tiros en Hato Rey y su novio fue hospitalizado con heridas de bala
Según García, Cruz y su novio, Edwin Rivera Pérez, estaban en la Avenida Roosevelt, saliendo de un restaurante en una camioneta Toyota Tacoma gris, cuando les dispararon. García le dijo a El Nuevo Día que una investigación preliminar descubrió que los pasajeros de otro vehículo comenzaron a disparar contra la camioneta de la pareja.
La pareja intentó escapar pero no pudieron, Pérez detuvo el vehículo y se bajó, tratando de refugiarse en una tienda cercana en un momento en el que fue grabado por las cámaras de vigilancia. Las autoridades llegaron al lugar y encontraron un automóvil Hyundai Accent rojo abandonado con agujeros de bala en el parabrisas. Están investigando si ese vehículo estaba involucrado en el altercado.
También encontraron “múltiples casquillos de bala de diferentes calibres”. Dentro de la camioneta, los funcionarios encontraron a Cruz, quien falleció por múltiples heridas de bala, según El Nuevo Día. Pérez fue hospitalizado con heridas de bala en piernas y brazos y se encuentra estable.
Cruz se entregó al FBI en 2019 después de ser acusada de estar involucrada en una banda de narcotráfico de las FARC
Cruz era conocida por las fuerzas del orden público después de aparecer en una acusación federal en febrero de 2019 junto con otras 75 personas sospechosas de estar involucradas en la banda de narcotraficantes FARC. Cruz se entregó al FBI después de ser acusada por un gran jurado federal. Fue acusada de conspiración por poseer y querer distribuir sustancias ilegales, como heroína, cocaína y marihuana, según Metro.
Cruz dijo que era inocente y argumentó que su ex novio, quien estaba involucrado en el tráfico, la vinculaba con el caso. Se le concedió la fianza y estaba en libertad condicional en el momento de su muerte, informó Metro. Después de que le concedieran la libertad bajo fianza en 2019, Cruz expresó en Instagram su alegría por reunirse con su hija. Ella escribió en parte: “Nadie tiene idea de cómo amo a mi hija y por ella daría la vida si es posible. Nadie sabe como sufrí al no estar con ella y no dormir con ella como hacía todos los días”.
Unos meses después de la liberación de Cruz, fue amonestada por el juez federal Gustavo Gelpí por no cumplir con las condiciones del toque de queda que le impuso el tribunal. Debían estar en su casa a partir de las 6 p.m. hasta las 6 a.m. todos los días, según El Nuevo Día.
García le dijo al medio que los investigadores aún están examinando si Pérez, como Cruz, tiene antecedentes penales o está vinculado a la acusación de las FARC. Indicó que un policía guarda vigilancia en el hospital por la seguridad de Pérez hasta que se sepa más sobre el motivo del tiroteo.
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