El estado de California exigirá que los trabajadores sanitarios se den la tercera dosis, o dosis refuerzo, de la vacuna contra el coronavirus.
Se trata de una medida extraordinaria, un mandato que las autoridades se vieron obligadas a ejecutar debido al constante aumento de contagios provocado por la variante Ómicron del coronavirus.
La noticia ya había sido confirmada el pasado martes 21 de diciembre. Ese día, el gobernador de California, Gavin Newsom, escribió un mensaje por Twittter en el que anunció que los trabajadore sanitarios debían recibir la dosis refuerzos. Al día siguiente, el miércoles 22 del corriente, el propio Newson brindó una conferencia de prensa en la que aportó más detalles al respecto.
El gobernador hizo hincapié en la efectividad de las vacunas, que presuntamente se debilita luego de transcurridas tanta cantidad de meses de la segunda vacunación. “Las dos dosis de la vacuna son fuertes, pero la tercera, el refuerzo, cambia el juego”, indicó Newsom.
“Quiero mostrar mi gratitud para quienes ya se han puesto el refuerzo, porque eso nos ha permitido superar el número de trabajadores que están desempeñando labores críticas en estos momentos”, agregó el gobernador de California.
La orden del gobernador va en concordancia con el pedido de Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, quien dijo que no se efectuarán nuevas cuarentenas debido a Ómicron. Sin el confinamiento como recuerso para frenar la propagación del virus, las autoridades necesitan ser rigurosos con la inmunización.
El mandato podría extenderse a otras personas
Consultado acerca de si el mandato de la dosis extra obligatoria de la vacuna podría extenderse más allá del personal sanitario, el gobernador de California, Gavin Newsom, dijo que de momento el estado solo piensa en inmunizar a niños.
“La prioridad son los niños y el personal de salud”, indicó el gobernador. Este miércoles, Estados Unidos aprobó la píldora de Pfizer contra el coronavirus. El medicamento llega en un momento clave, en los próximos meses podría erigirse como un complemento perfecto para la vacuna, estirando el período de eficacia de las mismas.
California teme a las reuniones por las fiestas
Por estas horas, las reuniones familiares para las fiestas de fin de año es uno de los temas principales de la agenda política y mediática de los Estados Unidos.
¿Los ciudadanos se pueden reunir a celebrar a pesar del avanece de la variante Ómicron? ¿Están desaconsejadas las reuniones populosas? Sobre esto respondió el gobernador de California.
“Nada de lo que hagamos aquí (refiriéndose al gobierno) importa, si no se toman las decisiones correctas en casa”, dijo Newsom dejando en claro que le preocupan las juntadas masivas.
La semana pasada, el estado de California retomó la obligatoriedad del uso de barbijo en espacios cerrados. De acuerdo a estadísticas del Departamento de Salud de California, el 70% del estado ya recibió al menos una de las vacunas contra el coronavirus. Quedan un estimado de 12 millones de ciudadanos que aún no pasaron ni siquiera una vez por el vacunatorio.
Un reciente spot de gobierno indicaba que las personas no vacunadas tienen siete veces más de posibilidades de contagiarse del virus.
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