Getty Images
En un hecho que ha despertado muchas dudas e incluso preocupación, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció la puesta en marcha de un nuevo plan para frenar el auge del coronavirus, que incluye la detección de nuevos contagiados para rastrearlos, ponerlos en confinamiento estricto para evitar que sean foco de nuevos contagios y vigilancia total.
Así lo dio a conocer el famoso mandatario, quien explicó su plan este miércoles, que tiene un costo de $1,300 millones de dólares, financiados por el gobierno federal.
Cuomo dijo que la medida fue adoptada justo ahora que los nuevos datos sobre el comportamiento del coronavirus en Nueva York muestran que la curva de contagios sigue disminuyendo, con 474, casi la mitad del promedio de casos diarios de la semana pasada.
El gobernador dijo que se puso en marcha el programa rastrear a los nuevos contagiados que no son hospitalizados.
“Estamos construyendo un ejército de rastreo”, comentó Cuomo en su conferencia diaria, según reveló el Diario de NY, mientras agregó que el ex alcalde Mike Bloomberg será el encargado de ayudar a diseñar el programa de rastreo completo.
“Michael Bloomberg diseñará el programa, diseñará la capacitación, hará una contribución financiera. Tiene una visión tremenda tanto desde el punto de vista gubernamental como desde el punto de vista comercial del sector privado”, dijo Cuomo.
El plan se empezó a implementar de manera inmediata con 500 empleados que rastrearán a pacientes contagiados.
“Eso será clave para contener el brote. Esta es una empresa monumental, todos lo haremos. Será en cuestión de semanas no de meses, para hacer esta empresa súper ambiciosa”, concluyó Cuomo. “El seguimiento comenzará, en realidad está comenzando ahora. Pero tiene que ser llevado a un nivel que nadie había imaginado antes”.
Sobre el plan, el alcalde Bill de Blasio dijo que la Ciudad ya tiene todo listo.
“Para rastrear a los que dieron positivo por COVID-19, la Ciudad trabajará con cada persona para conectarse con ellos de inmediato para cuidarlos y ayudarlos a aislarse de forma segura en su hogar, un hotel o un hospital”, manifestó.
“Se contratarán rastreadores de contacto adicionales para expandir sustancialmente el grupo existente de 200 detectives de enfermedades y rastreadores de contacto existentes en la Ciudad. La Ciudad proporcionará comidas, ropa limpia y recargas médicas para cualquier persona aislada y en cuarentena que pueda necesitar asistencia”.
