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Un nuevo golpe recibió este miércoles 13 de marzo Paul Manafort, exjefe de campaña del presidente Donal Trump, luego de que la jueza Amy Berman Jackson lo sentenciara a purgar 43 meses más de prisión sobre los casi 4 años que la semana pasada le había impuesto el Juez de Distrito T.S. Ellis, con lo que si condena total subió a casi 7 años y medio.
La magistrada de Washington, D.C. anunció el aumento de pena para el hombre de 69 años en relación con el primero de los dos cargos de conspiración criminal presentados por Robert Mueller y sentenció a Manafort a 13 meses de prisión en su segundo cargo criminal.
Antes de que la juez Jackson dictara su sentencia, Manafort pidió perdón e incluso le solicitó a la jueza que le permitiera estar un momento con su esposa.
“Siento mucho todo lo que hice y pido perdón por todas las actividades que nos han puesto aquí”, dijo Manafort, mostrando especial dolor por su mujer.
“Tendré 70 años en unas pocas semanas. Mi esposa tiene 66 años. Ella me necesita. La necesito. Les pido que piensen en eso y en nuestra necesidad mutua”, fue la súplica del exjefe de campaña de Trump antes de que la jueza anunciara su sentencia.
La magistrada Jackson no se mostró conmovida por la solicitud de Manafort y en cambio dejó claro que un “lo siento” no borra sus delitos.
“Decir, lo lamento, me atraparon, no es una súplica inspiradora de indulgencia”, dijo Jackson. “Una parte significativa (de la carrera de Manafort) se la pasó jugando con el sistema”.
La semana pasada Manafort fue declarado culpable de ocho cargos criminales, entre ellos fraude bancario, fraude fiscal y no presentar un informe de cuenta bancaria extranjera y aunque se esperaba que el juez lo condenara a un período de entre 19 y 24 años, la condena fue menor.
Mueller acusó a Manafort de ocultar millones de dólares en ingresos al gobierno de los Estados Unidos en cuentas offshore y mentir a los bancos para asegurar millones de dólares en préstamos. Gran parte de ese dinero, argumentaron los fiscales, se utilizó para mantener su estilo de vida opulento.
La jueza Amy Berman Jackson está supervisando el caso de Paul Manafort relacionado con la investigación de Rusia. Ella revocó su fianza y lo envió a prisión en junio de 2018 después de que los fiscales proporcionaran pruebas de que Manafort había estado hablando con al menos dos testigos del gobierno mientras estaba bajo arresto domiciliario. Lo pusieron en un ala separada del centro de detención, lejos de otros reclusos.
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