El presidente Donald Trump dijo esta semana que no va a calificar a China de manipular la tasa de cambio de su moneda, aunque durante la pasada campaña presidencial prometió varias veces lo contrario.
Este cambio de postura surgió en una entrevista con The Wall Street Journal, en la que el mandatario dijo que el Gobierno chino “no es un manipulador de [la tasa de cambio] de su moneda”, al tiempo que explicó que ha cambiado de parecer porque hace meses que China no toca la tasa de cambio y cumplir con su promesa de campaña podría perjudicar sus conversaciones con los chinos sobre la necesidad de acabar con la amenaza que representa Corea del Norte.
Durante la campaña, Donald Trump prometió repetidamente que iba a calificar a China como un manipulador de la tasa de cambio de su moneda a partir del primera día en el cargo. Por ejemplo, durante un discurso sobre sus planes económicos pronunciado en Monessen, Pensilvania, en junio de 2016, el mandatario enfatizó la decisión como parte de un plan para mejorar la economía.
“Voy a dar instrucciones a mi secretario del Tesoro para que califique a China como manipulador de la tasa de cambio de la moneda, algo que debía haber sido hecho hace meses”, afirmó Trump en entrevista con The Wall Street Journal.
A principios de mes, en una entrevista con el Financial Times el presidente volvió a abordar el mismo tema al acusar de nuevo a China como un manipulador de la moneda.