El dentista Walter James Palmer, quien mato a uno de los leones más famosos de Zimbabue, está arrependido de haber cazado a Cecil en uno de sus viajes de cacería al país africano.
El martes, 28 de julio, Palmer envió el siguiente comunicado:
“A principios de julio, estaba en Zimbabwe en un viaje de caza con arco para la caza mayor. Contraté a varios guías profesionales y conseguí todos los permisos adecuados. Que yo sepa, todo acerca de este viaje fue legal y adecuadamente manejado y conducido.
No tenía idea de que el león que maté era uno de los favoritos y de los más conocidos localmente, y que además tenía collar y era parte de un estudio, hasta que ya había terminado la caza. Me dejé llevar por el conocimiento experto de mis guías locales profesionales para asegurar una caza legal”.
Mientras muchos han atacado a Palmer en las redes sociales por haber matado a uno de los leones más majestuoso de Zimbabue, el dentista asegura que no ha sido contactado por las autoridades.
“No he sido contactada por las autoridades en Zimbabue o de los Estados Unidos acerca de esta situación, pero voy a cooperar con cualquier investigación.
“Una vez más, lamento profundamente que el haber hecho una actividad que amo y que lo practico responsablemente haya resultado en la muerte de este león”.
Cabe recordar que Palmer pagó alrededor de $55,000 para cazar Cecil. El majestuoso animal fue atraído a una zona fuera de la reserva zimbabwense y Palmer lanzó una flecha contra él, pero eso no lo mató. Cecil caminó por 40 horas con una flecha penetrada en su cuerpo cuando nuevamente fue interceptado por Palmer que lo remató disparando le con un rifle y luego le corto la cabeza.
Cuando se dieron cuenta que Cecil tenía un GPS en su collar trataron de destruirlo.
La asociación de defensa de derechos de los animales PETA ha pedido a través de un comunicado que el dentista estadounidense sea extraditado, juzgado y condenado por la muerte del león Cecil, que se había convertido en todo un símbolo de Zimbabue.