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Irina Baeva lleva ya varias semanas recibiendo dardos de todas partes, tras volverse a alborotar el avispero a raíz de su relación con Gabriel Soto. Y mientras muchos televidentes y personalidades de la pantalla chica como Lili Estefan y Laura Bozzo, entre otras, la tachan de ser una “roba-maridos”, de haber destruído el bello hogar que existía entre el galán y Geraldine Bazán y de querer hacerse la víctima, cuando según ellos es una “mosquita muerta”, salió una voz muy fuerte en su defensa.
Se trata del padre de Soto y suegro de la rusa, quien no solamente quiso limpiar el nombre de su nuera, sino que además dijo que Irina es una gran mujer, a quien están crucificando injustamente.
“Cada quien puede opinar lo que quiera, pero la verdad solo hay una y esa, yo como su padre y Sandra, mi esposa, como mi pareja, sabemos lo que vivió, lo que pasó y sabemos la verdad y estamos tranquilos. Yo soy un agente de conciencia. Si no hubiera actuado realmente de acuerdo a lo que debió ser como hombre y como pareja, le hubiera llamado la atención. No fue así. Él finalmente encontró su felicidad”, aseguró el papá del actor en dialogo con varios reporteros en la conferencia que realizó Irina el fin de semana.
El señor fue más allá, y en declaraciones que parecieron dardos directos hacia Geraldine Bazán, lanzó un par de frases que dejaron pensando a muchos, entre otras que el actor jamás fue feliz con la madre de sus hijas.
“Por primera vez, y puedo decirlo, en sus 44 años, ya casi 45, lo veo feliz, lo vemos radiante, sus ojos, su cara… Ha encontrado no solamente una gran mujer sino una gran compañera, una gran pareja”, dijo el patriarca de la familia Soto, quien soltó con mucha calma otra estocada a Geraldine, advirtiendo que sabe muchos secretos que prefiere guardarse.
“Yo tengo boca y pude haber hablado, y mucho, y muchas cosas, pero somos gente decente. Yo prefiero el silencio y que la verdad caiga por su propio peso”, dijo el padre del ex Mister México, quien al ser interrogado sobre qué siente por Bazán fue muy diplomático.
“Ella es la madre de nuestras nietas, y como tal tenemos que respetarla y tratarla. Cada quien se maneja como quiere”, dijo.
Y sin ocultar que evidentemente prefiere cien por ciento a Irina que a Geraldine, el padre de Gabriel dijo además que le impresiona la inteligencia de la rubia, al igual que su fortaleza.
“Me impresioné. Cuando conocí a irina tenía apenas tres años apenas en México y cómo dominaba el idioma… me daba clases. Es una chica capaz, es autodidacta y ha sido brillante no solo en el manejo del lenguaje, sino en lo que hace. Ella estaba estudiando periodismo y mira lo que ha logrado y como mujer”, dijo el señor Soto, quien terminó afirmando que le encantaría que su hijo y su novia estén juntos hasta que la muerte los separe.
“Definitivamente y como pareja, se casen o no, eso ya es problema de ellos, pero sí quisiera que ella esté a su lado siempre”, concluyó el mexicano.
