Era cuestión de tiempo hasta que los mercenarios fueran despedidos.
Luego de contratar a dos mariscales de campo para reemplazar a Kirk Cousins, Nate Stanley y Kellen Mond (todos ellos fueron puestos en la lista de infectados por el Covid-19 el lunes 2 de agosto), los Minnesota Vikings han puesto en libertad a Case Cookus, quien solo entrenó por tres días con el equipo.
Cousins y Stanley, ambos considerados contactos estrechos de “alto riesgo”, tuvieron que aislarse por un período obligatorio de cinco días luego de que Mond diera positivo por Covid-19 el sábado pasado. Cousins y Stanley fueron reinsertados al equipo, lo que propició la partida de Cookus.
Mond, quien no está vacunado, seguirá en cuarentena por al menos nueve días más. Cousins y Stanley se sumaron a Jake Browning y al recientemente contratado Danny Etling como los mariscales de campo del equipo.
La situación del Cousins en duda para esta temporada
Aunque la vuelta a los entrenamientos de Cousins fue alentadora, su postura y su reacción ante su ausencia de cinco días fue preocupante por varios motivos.
Pareció que Cousins hizo todo lo posible para evitar tener que estar marginado. Comenzó su rueda de prensa del jueves explicando que en realidad “no tuvo contacto estrecho” con Mond por voluntad propia -fue debido al tamaño de la sala de reuniones de los mariscales de campo, la cual ya ha sido cambiada desde entonces.
El comentario fue interpretado como que Cousins culpó al tamaño de la sala en vez de hacer responsable. Mientras tanto, el mariscal de campo de 33 años pidió que se “haga lo que sea” para respetar los protocolos y evitar perderse partidos -menos vacunarse. Desde el punto de vista del equipo, estuvo de acuerdo con los reporteros acerca de que esa era la mejor opción, sigue opinando que esa es una decisión personal y que prefiere seguir los protocolos.
La NFL ha incentivado a los jugadores a que se vacunen permitiéndoles obviar más que el año pasado las reglas más duras en cuanto a distancia social, requisitos de cuarentena, restricciones de viaje y uso de máscaras. Los jugadores que no estén vacunados están sujetos a ser considerados contactos estrechos, lo cual los incluiría en la lista de infectados por Covid-19 por un tiempo determinado incluso si no tienen el virus -algo similar a lo que sucedió en la sala de mariscales de campo la semana pasada.
La semana pasada fue la primera vez en la que Cousins se perdió cuatro entrenamientos seguidos en su carrera. Sin embargo, no está preocupado por su disponibilidad. Si Cousins fuese marginado de nuevo, no sería por una lesión ligada al deporte y le costaría el sueldo de un partido -un descuento bastante pequeño considerando las garantías en su contrato.
Los Vikings necesitan mariscales de campo vacunados
La decisión personal de Cousins de no vacunarse es eso, algo personal. Sin embargo, deja a los Vikings con una desventaja deportiva con el riesgo de que vuelva a ser incluido en la lista de ausentes por Covid-19.
La sala de mariscales de campo fue devastada el sábado, solo dejando a Jake Browning, quien está vacunado, a participar en todas las jugadas del entrenamiento de ese día. Aunque Cousins y Stanley dieron negativo por Covid-19 en la semana, Browning fue el único mariscal de campo disponible debido a normas de la NFL.
Por el momento, los Vikings son el equipo con el menor porcentaje de jugadores vacunados en la NFL, con el 64.5%, según el Washington Post. El Washington Post reportó que el 90% de los jugadores de la NFL están, aunque sea, parcialmente vacunados.
Puede que Minnesota necesite a un mariscal de campo suplente que esté vacunado si el equipo no aumenta su tasa de vacunación.
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