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La razón principal para que la Juventus trajera a Cristiano Ronaldo era para finalmente vlver a ganar la Champions League después de 24 años. Después de tres temporadas, la fanaticada juventina y la prensa italiana comienzan a tildar el proceso como un fracaso tras la última eliminación bianconera en Champions, esta vez a manos de Porto. Esta eliminación fue la más especacular por la manera en la que jugó el Porto teniendo que aguantar el resultado con un jugador menos durante 66 minutos.
Este partido fue un testamento a la manera en la que Sergio Conceicão y su organización táctica que supo plasmar dentro del terreno de juego. Sergio Oliveira fue el héroe del partido al anotar un doblete con el balón detenido, en eso se incluyó el tiro libre que remató
La Vecchia Signora llegaba con la necesidad de apenas anotar solamente un gol para avanzar a los cuartos de final de la Champions League después de perder 2-1 en el Estadio Do Dragão en Porto. Pero una vez más los errores defensivos fueron los que senteciaron a la Juvnetus. En este caso fue Merih Demiral que cometió una falta en el área que terminó en el primer gol del partido.
Porto mantuvo la organización en el terreno de juego mientras que la Juve parecía perdido en el terreno de juego hasta el minuto 54 cuando Mehdi Taremi fue expulsado de manera ridícula. El jugador despejó el balón después de que el árbitro Bjorn Kuipers pitara una falta. Esto le ocasionó la segunda amarilla del partido.
Pero de inmediato, la Juve llegó y anotó el gol del empate gracias a Federico Chiesa. En un espacio de 14 minutos, el exFiorentina tuvo su mejor partido con el bianconero, pero fue uno de los pocos que se vieron enchufados. Entre Chiesa y Juan Guillermo Cuadrado la Juve parecía que tenía una esperanza. Pero con el pasar de los minutos, Porto se acomodó bien y supo cómo evitar varios avances de la Juve.
Pero Cuadrado fue el que presionaba y casi tuvo el gol de la clasificación pero su remate pegó en el travesaño.
Después en el tiempo suplementario, fue Oliveira el que le dio el gol de los cuartos al Porto con un tiro libre que pasó por debajo de la barrera y Wojciech Szczęsny sin posibilidades de tapar el remate restrero. Pero como solió ser la serie, hubo un nivel de sufrimiento tremendo. En el minuto 117, Adrian Rabiot anotó de cabeza en un tiro de esquina pero eso fue todo lo que pudo hacer una Juve que no pudo dar más y vio cómo Pepe y Agustín Marchesín se convirtieron en héroes del cotejo.
¿Y los culpables?
Uno de los aspectos que le dio otro sazón a este enfrentamiento fue el trabajo que estaba haciendo el presidente del club, Andrea Agnelli, en su esfuerzo constante para llegar a completar la nueva Champions y había minimizado a equipos “menores” el año pasado cuando hablaba del Atalanta y los merecimientos que tenía el equipo para llegar al torneo más importante de clubes.
El presidente del club será uno de los culpados al lado de Fabio Paratici y Pavel Nedved quienes fueron en parte, artífices de la llegada de Ronaldo y se hicieron varias cosas para poder traer al jugador a Turín. Pero el que muy probablemente pague por los platos rotos será Andrea Pirlo ya que el equipo está a 10 puntos de la punta en la Serie A y las demandas eran altas para alguien tan poco experiencia dirigencial como él.
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