Una de las anécdotas más famosas sobre los primeros años de Lionel Messi en el FC Barcelona tiene relación con el documento donde firmó su primer contrato con el club. Normalmente, los jugadores firman sus contratos de centenares de hojas con plumas carísimas en despachos de directivos muy importantes. En el caso del astro argentino, la historia es radicalmente distinta.
Leo Messi llegó a Barcelona a finales del año 2000 para empezar su periodo de prueba con los infantiles. Después de dos semanas, era el momento de tomar una decisión sobre si el futuro mejor jugador del mundo se quedaba en el equipo o tenía que volver hacia Argentina.
Fue entonces cuando Carles Rexach, en aquel momento el secretario técnico del club, tomó un papel clave. Para tomar esa decisión, Rexach preparó un partido entre el Infantil B y en el Infantil A. Messi tuvo una actuación memorable, anotando 5 goles. El secretario técnico llegó con el partido ya empezado, pero en la primera acción en la que el argentino tocó el balón, dijo: “Collons, a ese niño hay que ficharlo ya”.
Su primero contrato: una servilleta de papel
Después del partido, Carles Rexach, Josep Maria Minguella (un colaborador del club) y Horacio Gaggioli (el que fue el primer representante de Messi) se reunieron en el Club de Tennis Pompeia el 14 de diciembre del 2000.
Conocido por ser un hombre muy natural y espontáneo, el secretario técnico decidió redactar el primer contrato de Leo en una servilleta de papel que encontró en el bar del club de tenis. “En Barcelona, a 14 de diciembre del 2000 y en presencia de los Sres. Minguella y Horacio, Carles Rexach, secretario técnico del FC Barcelona, se compromete bajo su responsabilidad y a pesar de algunas opiniones en contra a fichar al jugador Lionel Messi siempre y cuando nos mantengamos en las cantidades acordadas”.
Su representante Horacio Gaggioli contó en la televisión española (Canal Intereconomía) el relato de los primeros días del jugador en la capital catalana. Evidentemente, el detalle de la servilleta de papel fue mencionado.
¿Quién guarda esa servilleta y qué valor económico tiene?
La servilleta más famosa y más cara del mundo la mantiene aún en propiedad Horacio Gaggioli, su primer representante. Llegó a recibir propuestas de ofertas por el documento histórico (no llegó a precisar la cantidad exacta, ya que en ningún momento se reunió con los posibles compradores) por parte de una empresa de Estados Unidos, un museo de Tokio y una casa de subastas inglesa.
Sin embargo, Gaggioli es un hombre de palabra, un romántico que no se dejó comprar. Él cree que un documento como ese debe guardarse “en el Museo del FC Barcelona, en un lugar preferencial junto a los balones de oro de Messi, ya que es papelito cambió la historia contamporánea del club”, contó a Infobae.
¿Y por qué el FC Barcelona no decidió exponer la servilleta en su museo? Gaggioli cuenta el motivo en esa misma entrevista: “El club tiene el interés, pero de momento ven a la servilleta como un primer contrato, y como Leo todavía está en actividad no quieren que se publique un contrato”.
Por cierto, el famoso documento está guardado en una caja fuerte del banco Crèdit Andorrà... y es que, en palabras de Gaggioli, “se trata de un documento sagrado.”