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El Bayern sufrió mucho para poder derrotar al Werder Bremen, pero al final pudo conquistar su trigésimo título de su historia y el octavo de manera consecutiva. Se sabía que iba a ser una misión difícil en el Wohninvest Weserstadion para conseguir los tres puntos que necesitaba para cumplir su objetivo.
La gran diferencia del partido por el lado ofensivo fue la dinámica que ofrecieron Leon Goretzka, Thomas Muller y Robert Lewandowski. Este último fue el que anotó el gol del título en el minuto 43.
Bayern quiso extender su ventaja en el segundo tiempo, pero Lewandowski tuvo su segundo gol del partido anulado por Muller haber estado fuera de lugar. Pero en este segundo tiempo, el Bayern no tuvo ningún percance hasta que sufrieron la expulsión del canadiense Alphonso Davies en el minuto 80.
En ese tramo se convertiría en héroe fue Manuel Neuer quien salvó al Bayern del empate con una atajada espectacular atajada contra Claudio Pizarro.
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Al cumplir su primer gran objetivo, ya el enfoque del Bayern sería ganar la final de al Copa Alemana en el cual enfrentará al Bayer Leverkusen en la ciudad de Berlín el 4 de julio. Después de eso estaría con su mente puesta en el partido de vuelta en la Champions League de local con ventaja de 3-0 ante el Chelsea.