Ha pasado ya una semana desde que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó una polémica ley aprobada por la Legislatura de su estado, que busca arrinconar la migración ilegal, con normas duras, que en opinión de detractores violan derechos fundamentales y libertades civiles.
Y además de la prohibición de que empresas de más de 25 empleados contraten e indocumentados, con el riesgo de recibir multas y severas sanciones, y de transportar a la Florida personas sin papeles, incluso familiares, con amenazas de cárcel hasta por 15 años, la ley incluye otro aparte que afectará a buena parte de los inmigrantes.
Dentro de la llamada ley de DeSantis, se asegura que aquellos inmigrantes indocumentados que se movilizan por el estado, manejando con licencias de otros estados que conceden permisos de manejo a personas sin papeles, como Nueva York y Nueva Jersey, a partir del 1 de julio no podrán hacerlo o se exponen a castigos.
“Es importante destacar que a los extranjeros ilegales ya no se les permitirá depender de licencias de conducir de otros estados. Si otro estado emitió una licencia a un extranjero ilegal que no pudo demostrar su presencia legal en los EE.UU. cuando se emitió su licencia, esa persona tiene prohibido operar un vehículo motorizado en Florida”, aseguró la oficina del Gobernador republicano, en un comunicado.
La nueva disposición tiene un severo impacto en Florida, estado que depende mucho del transporte vehicular ante la falta de líneas de metro y buen servicio de autobuses, lo que tiene inquietos a buena parte de los más de 700 mil indocumentados que se estima viven en esa parte del país.
“§322.033 es otro estatuto completamente nuevo destinado a evitar que las personas indocumentadas usen licencias de conducir de otro estado en el estado de Florida… Algunos de esos estados emiten licencias de conducir a personas que se encuentran en los Estados Unidos sin autorización. §322.033 invalida esas licencias”, explicó en su página online la firma de abogados Lasnetski Gihon Law, en un informe que puedes ver aquí.
“Si una persona indocumentada tiene una licencia emitida por otro estado que es una clase de licencia emitida exclusivamente para inmigrantes indocumentados que no pueden demostrar su presencia legal, esa licencia no será reconocida por el Estado de Florida y esa persona recibirá una citación por conducir sin licencia. El Departamento de Seguridad Vial y Vehículos Motorizados (“DHSMV”) mantendrá una lista en su sitio web de las licencias de otros estados que no son válidas”, manifestó la firma experta en leyes.
Sin embargo, la ley asegura que “una persona que tiene una licencia de conducir de otro estado invalidada, no está exenta de obtener una licencia de conducir válida en Florida”.
El Senador Blaise Ingoglia, promotor de la ley, aseguró que las disposiciones nuevas frenarán el flujo de inmigrantes sin papeles que ha ido aumentando en los últimos meses.
“Nuestra Frontera Sur ha estado lidiando con una crisis provocada por el hombre bajo la ineptitud del presidente Biden, que permitió que más de 6.3 millones de inmigrantes ilegales inundaran nuestra frontera y bajo el liderazgo del gobernador Ron DeSantis, Florida hace historia al promulgar la ley estatal más fuerte contra la inmigración ilegal jamás presentada”, dijo el político.
“Fue un honor impulsar este proyecto de ley a través del proceso, sabiendo que estamos protegiendo a los floridanos y sirviendo como modelo para que la nación combata esta crisis creada por nuestro propio presidente”, agegó el senador republicano.