Este martes la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) autorizó la aplicación de la cuarta dosis de la vacuna de las farmaceúticas Pfizer y Moderna contra el COVID para todas las personas mayores de 50 años.
Y en medio del llamado de las autoridades federales a que los estadounidenses recurran a ponerse la nueva dosis, que representa el segundo refuerzo para luchar contra el COVID, que sigue amenazando con la subvariante de ómicron, una de las preguntas que ronda a muchas personas es qué tan necesaria y segura resulta inyectarse la nueva dosis.
La respuesta de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) es que además de ser una dosis segura, el efecto de la cuarta dosis es que protege a quienes se la ponen, evitando que desarrollen síntomas graves y enfermedad seria por COVID, que termine enviándolos al hospital e incluso poniendo en riesgo su vida.
Así lo aseguró la directora de los CDC, la Dra. Rochelle P. Walensky, quien el martes, tras conocerse el anuncio de la FDA sobre la autorización de la cuarta dosis, instó a que la gente se proteja más contra el COVID, a través de la vacunación.
“Los CDC ampliaron la elegibilidad para una dosis de refuerzo adicional para ciertas personas que pueden tener un mayor riesgo de sufrir resultados graves por el COVID-19. Las dosis de refuerzo son seguras, y las personas mayores de 50 años ahora pueden recibir un refuerzo adicional 4 meses después de su dosis anterior para aumentar aún más su protección”, manifestó la funcionaria federal, como lo señaló un comunicado de los CDC.
La directora de los CDC destacó con relevancia que para las personas de la tercera edad y aquelos que padezcan enfermedades subyacentes resulta todavía más urgente que no se desprotejan, pues las vacunas van perdiendo inmunidad con el paso del tiempo.
“Esto es especialmente importante para las personas mayores de 65 años y las personas mayores de 50 años con afecciones médicas subyacentes que aumentan el riesgo de enfermedad grave por COVID-19, ya que es más probable que se beneficien de recibir una dosis de refuerzo adicional en este momento”, aseguró Walensky, mencionando que no se descarta que en el futuro se necesiten más dosis de refuerzo. “Los CDC, en colaboración con la FDA y nuestros socios de salud pública, continuarán evaluando la necesidad de dosis de refuerzo adicionales para todos los estadounidenses”.