Cientos de personas se congregaron este viernes en las calles de Houston y en una escuela preparatoria del suroeste de la ciudad para darle un último adiós a Vanessa Guillén, la soldado hispana asesinada trágicamente mientras prestaba su servicio militar en la base de Fort Hood (Texas). Un caso que ha conmocionado al mundo.
Esta aterradora historia que puso en evidencia una grave situación de abuso dentro de la institución militar despertó la atención de millones gracias a la insistencia de la familia de Vanessa Guillén desde su desaparición el día 22 de Abril. A las denuncias de su desaparición e incansable búsqueda se unieron también famosos como Salma Hayek.
Luego de casi tres meses de insistentes esfuerzos el caso se resolvió. Todos conocen los detalles de su macabro asesinato y el desenlace doloroso para sus seres queridos.
Por eso hoy viernes en Houston, la ciudad natal de la joven de 23 años, se rindió mensaje a su vida y su memoria. Sus restos mortales, que lograron ser encontrados, masacrados y quemados por los criminales, fueron paseados en un féretro en una bella carroza durante una solemne ceremonia.
Con banderas de Estados Unidos y de México a media asta, como recordando sus orígenes y su lugar de nacimiento, el féretro de Vanessa fue transportado en un carruaje blanco con una urna transparente antes de llegar a César Chávez High School, el lugar donde terminó sus estudios, jugó fútbol y decidió enrrolarse en el ejército.
La familia, que no logra superar el dolor de su pérdida estuvo en esta marcha fúnebre, acompañando a su hija y hermana. Como reportó Telemundo algunos de los miembros de su familia expresaron su sentir:
“Ella está feliz donde está, al lado de Dios y la Virgen María”, dijo Lupe Guillén, la hermana de Vanessa. La madre y abuela de Vanesa sollozaron ante la llegada del féretro a la escuela, que fue adornada con golbos, flores y fotografías de Vanessa.
El servicio católico fue abierto al público desde el mediodía y luego de las 5 p.m. quedó solo a disposición de familiares y amigos más cercanos para un evento privado.
El recorrido
El féretro de Vanessa salió de la funeraria hacia las 11 a.m. hacia la preparatoria César Chávez.
La carroza de caballos con los restos de la especialista militar Vanessa Guillén recorrió las calles por donde se paseó tantas veces cuando era niña con su familia y amigos. La hermana de Vanessa, Lupe Guillén, acompañó a su hermana en todo el recorrido.
La carroza de caballos se paseó por la calle Howard y al voltear sobre la carretera Old Galveston se dirigió a las instalaciones deportivas de la escuela.
Como reporta La Opinión durante el camino y justo en el momento que la carroza pasaba por una taquería donde se encuentra plasmado un mural dedicado a Vanessa, se comenzó a escuchar la canción “Como la Flor” de Selena y la hermana menor de Vanessa, Lupe Guillén, no pudo contener las lágrimas.
En el recorrido, algunas personas grababan con sus celulares el momento mientras que otras ya estaban instaladas en la entrada de la preparatoria para poder ingresar a ofrecer sus respetos.
La carroza de caballos se paseó por la calle Howard y al voltear sobre la carretera Old Galveston se dirigió a las instalaciones deportivas de la escuela.
Familiares y amigos cercanos acompañaron a la carroza en una vuelta por la pista donde tantas veces entrenó Vanesa y en la parte interior el campo de fútbol donde defendió los colores de su escuela, reporta también La Opinión.
En la entrada de la preparatoria César Chávez High School decenas de personas la esperaban, pero antes de llegar, la especialista militar Vanessa Guillén fue paseada por uno de los lugares que le dio mucha felicidad mientras que fue una “Loba”.
Una de las grandes pasiones de Vanessa siempre fue el deporte; aun estando en la Base Militar de Fort Hood se dedicaba a correr y pasaba horas en el gimnasio.
Vanessa, durante su trayectoria en las escuelas Chávez, fue una destacada atleta. Jugó fútbol y corrió para los equipos de campo traviesa y atletismo como corredora de larga distancia.
Vanessa desapareció el pasado 22 de abril de la base militar de Fort Hood (Texas) donde prestaba el servicio militar.
Pasaron más de dos meses, la familia denunció que Vanessa era objeto de acoso sexual dentro de la base, pero que la soldado nunca denunció por temor a represalias, según su madre, Gloria Guillén.
Los temores de la familia de Vanessa se hicieron realidad cuando investigadores militares hallaron restos humanos cerca del Río León y poco después confirmaron que pertenecían a la soldado originaria de Houston.
El sábado será el último adiós
Entre las personas que acompañaron los restos de Vanessa se encontraban sus familiares inmediatos, algunos que viajaron a Houston desde Zacatecas, México y amigos cercanos. Ellos también. Estarán presentes eres mañana para la ceremonia final.
El viernes fue dedicado a honrar a Vanessa públicamente pues a partir del mediodía se le permitió el ingreso al público y durante el día se ofrecieron testimonios.
Este sábado la joven soldado será enterrada finalmente en un servicio privado exclusivo para sus familiares.